La moda handmade llegó a nuestro país hace ya algunos años. Surgió como una alternativa a la producción en serie, masiva y despersonalizada, de las grandes cadenas multinacionales. En la ropa, el cazado, los muebles o incluso la papelería empezó a tomar cada vez mayor protagonismo la etiqueta “handmade”. Lejos de desaparecer, ha dejado de ser tendencia para convertirse en un estilo de vida.
La moda handmade
La idea del handmade no es nueva. De hecho, siempre ha estado ahí, resistiendo o reinventándose para adaptarse, como tantos otros productos, a los nuevos estilos. Como contraposición a la producción industrial, los productos handmade aportan un valor añadido: elaboración a medida, de calidad y en tiradas cortas o exclusivas.
Pero además del método de fabricación, la idea del handmade va muy ligada a la imagen de los artesanos y artesanas y a su manera de vivir. Comprometidos con el saber hacer, no son pocos los que ya han sabido combinar las técnicas tradicionales con las innovaciones más recientes. Como vimos en el último post, internet ha abierto las puertas a jóvenes profesionales que fabrican sus productos con sus propias manos.
Hace años era difícil imaginar que las nuevas generaciones preferirían el campo a la ciudad o el taller a la oficina. Y es que la idea del handmade conecta, directamente, con muchas de las aspiraciones de los millennials.
Diseño handmade: la creatividad como protagonista
Cada vez más encontramos diseñadores y marcas que apuestan por los productos hechos a mano. Hoy os presentamos algunos ejemplos de profesionales que han encontrado su sitio en el mercado gracias a esta filosofía y son un referente.
Deassín
En 2013 Lucía Ruiz de Assín emprende el proyecto Deassín. Desde entonces, elabora joyas que son verdaderas obras de arte. Minimalistas y de corte contemporáneo, sus joyas son un ejemplo de producto handmade elaborado de manera profesional. Como ella bien dice “La joya es un medio de expresión artística y el cuerpo un punto de partida sugerente”.
Esta manera de concebir el producto es lo que hace tan exclusiva cada una de sus joyas y no un precio astronómico. Si entráis en su web veréis que son piezas para todas las ocasiones, con un estilo propio y para todos los bolsillos.
Sockaholic
Sockaholic es una marca de calcetines española con sede en Madrid. Hasta aquí podría parecer normal, pero veréis lo original y atrevida que es. El proyecto nace el 2011 en torno a un grupo de amigos que tuvieron la acertada idea de crear una tienda online desde donde vender calcetines de algodón de alta calidad. Lejos del diseño sosaina de la mayoría de multinacionales, apostaron por una imagen fresca y urbana, ofreciendo un producto de una calidad excelente.
Los calcetines de Sockaholic son la mar de chulos y se pueden encontrar en las principales capitales. También podéis comprarlos a través de su tienda online. Si entráis, descubriréis que el precio es de lo más atractivo, tanto como el diseño de sus calcetines.
Handle Drop
Más reciente es la marca Handle Drop. Nacida en el 2015 de la mano de tres diseñadores anónimos, es un proyecto joven que apuesta por la moda handmade de alta calidad. Sus fundadores concibieron esta marca en torno tres pilares: calidad, exclusividad y diseño artesanal. Persiguiendo esta meta, elaboran bolsos fabricados con pieles italianas de altísima calidad. Contrastes, misterio, geometría o vanguardia son algunos adjetivos con los que describen sus modelos. El producto esta pensado para ser aquí el protagonista.
Pese su reciente aparición, Handle drop ofrece diversas líneas de productos, todos ellos funcionales y fabricados en España.
Cabe señalar el compromiso de la empresa con el origen de las pieles que utilizan. Handle drop aplica estándares de producción responsable, utilizando únicamente pieles de origen animal criados en granjas para la obtención de carne. En ningún caso, utilizan piezas de animales sacrificados únicamente para el suministro de pieles.
Si visitáis su web descubriréis, una vez más, veréis que los precios son muy competitivos. Son un ejemplo de como la elaboración artesanal y responsable no necesariamente debe ser cara. Al contrario, puede competir directamente con el resto de marcas del mercado bajo el sello de moda handmade.
Labelfree
Acabamos el post con otro ejemplo modelo, esta vez centrado en el calzado: Labelfree. Se trata de una propuesta atrevida, muy diferente a lo que solemos encontrar en tiendas o portales online. Labelfree nace en Elche, una ciudad con una larga tradición en la fabricación de zapatos. Hartos de ver como los intermediarios, distribuidores y puntos de venta encarecían el precio, decidieron acortar la distancia hasta el cliente final. Como bien explican, unos zapatos que pueden tener un coste 30€ y se puede acabar pagando por ellos 150€.
Ante esta situación decidieron ofrecer zapatos sin intermediarios. De la fábrica a Labelfree y de aquí al cliente final. De esta manera se reducen los intermediarios y el precio final del producto.
Esta simplificación no tiene porqué traducirse en una pérdida de calidad. De hecho, trabajan con fábricas que producen modelos para las firmas de mayor prestigio. La diferencia está en la “ausencia de marca”. Y es que Labelfree entrega sus zapatos con un timbrado «Made With Love in Spain», sin logotipos ni referencias pretensiosas. El precio final, siendo la misma calidad, es menos de la mitad y sus diseños son igual de elegantes. De hecho, estan tan convencidos de la calidad y gusto de sus zapatos que la primera devolución es gratuita.
Estos son sólo algunos ejemplos de la moda handmade, que ha acabado siendo un reflejo de un estilo de vida. El hecho de estar fabricado a mano a hehco resurgir antiguos oficios que se creían perdidos u obsoletos. Y, quizás lo más importante, el precio de sus productos es sumamente competitivo. Sin perder exclusividad, han sabido encontrar su sitio en el mercado.